domingo, 15 de junio de 2008

Quini y los caminos de la vida. ¡Aupa Sporting!


Consumado el deseado ascenso del Sporting a Primera, EFE rebotó ayer estas fotos de Quini es un acto celebrado por la mañana en el que fue homenajeada la gran estrella rojiblanca.
Manolo cuando llegan estos momentos y la vieja estrella lucha por driblar una grave enfermedad.
Hoy y siempre desde aquí todo el apoyo para este excepcional jugador que marcó una época. Para este ariete que fue el jefe del área en su querido Sporting, en el Barcelona y en la Selección. También la enhorabuena por ese ascenso que, a buen seguro, va a ser su mejor terapia.
Ahora cierro los ojos y recuerdo a Héctor del Mar gritar: "No diga gol, diga Quini".
En fin, un grande como él tiene que seguir en la guerra de la vida y espantar los males. Se lo ha ganado.

El virrey charro de Valladolid.


¿Cada cuál tiene lo que se merece? Seguramente.
Viene a cuento del Fernández Mañueco, quien manda en Salamanca. Desde hace años maneja las riendas de esta tierra en Valladolid. El señor Mañueco, con su cara de niño bueno, es una especie del 'virrey' del siglo XXI. A pesar de –por sus gestos– y por su imagen de no haber roto un plato es uno de los hombres más temidos (por tanto con más poder) en el PP.
Lo auparon a sus cargos los votos de los salmantinos, una vez sí y otra también; sin embargo él los ha abandonado y apenas mira para defender los intereses charros en Pucela. Ahí tienen como ejemplo las carreteras o infraestructuras que dependen de la Junta. Una ruina. Pero mientras hay tragar con políticos tan nefastos. ¿Nos los merecemos? Pues sí, porque una vez sí y otra también, los votan masivamente.

sábado, 14 de junio de 2008

La pesadilla de Valladolid


Todavía recuerdo cuando hace ya cerca de 30 años al serrano Pepe Hidalgo empezaban a conocerlo como Pepe aviones, a raíz de que estableciera la línea aérea Salamanca-Zurich. Se avecinaban tiempos de cambio cuando cada domingo, al caer la tarde, llegaba a Matacán un flamante DC-9 de Aviaco que llamaba la atención porque entonces, esa nave era la reina de los cielos, junto a su impresionante fuselaje azul marino, característico de esa compañía.
Aquellos vuelos, en sus inicios gozaron de tanta expectación popular que poco antes de llegar el avión de Suiza (como lo denominaba la gente), Matacán se convertía en una especie de romería al que acudía el personal para ver de cerca ese gigantesco aparato, tan distinto de las clásicas aeronaves que había entonces Matacán, como los DC-3, ya en su etapa final y la llegada de los primeros Aviocar, que junto a las pequeñas avionetas de la ENA eran tan familiares en los cielos charros.
Desde entonces y hasta hoy, el aeropuerto charro ha acogido numerosos vuelos. Porque después, durante un tiempo, se puso en marcha una línea a Barcelona. Más tarde numerosos charter hacían escala en Salamanca y desde aquí volaban, preferentemente, a las Canarias, hasta que hace varios años, otra vez Pepe Halcón apostó de llenó por Matacán y cada semana salían aviones a Mallorca, Tenerife, Málaga... en los mejores tiempos de la explotación comercial del aeropuerto charro.
Pero mira por cuanto que Salamanca goce de un magnífico aeropuerto con una de las mejores pistas de España (gracias a las numerosas actividades docentes de la Base Aérea de Matacán y a la escuela de pilotos Adventia) debe escocer tanto a los jerifaltes de Valladolid, que llevan años con ganas de quitarle su utilidad comercial. Y dedicarlo únicamente a las otras actividades para que quien quiera volar tenga que ir a Villanubla.
Porque parece que en Pucela, cada vez que se anuncian las cifras de movimiento de pasajeros de Matacán, a más de uno lo corroe tanto la envidia y la mala leche que desde hace tiempo no dejan de cerrar puertas para impedir su normalidad.
Ahora, la última que tienen apuntada es pretender quitarle su categoría, mientras que Valladolid se ha convertido en una pesadilla para Salamanca. Sobre todo por la brutal centralismo que ejerce sobre el resto de una Comunidad, como la nuestra, que carece de sentido histórico y mientras no se demuestra otra cosa, tiene la principal función de llevarlo todo a la capital pucelana. Porque si hay cuatro perras en Salamanca o en Soria, ya se buscan la vida para invertirlas a la vera del Pisuerga. Si hay carreteras de la Junta tan tercermundistas como la que une Ledesma y La Fuente, que se olviden, que primero son las de Valladolid. Y los políticos charros a tragar, porque si abren la boca para protestar, y se molesta algún jefe de Valladolid, adiós poltrona, que a fin de cuentas –mientras no demuestren lo contario– es lo único que le interesa, vamos lo que trae el cargo (el cocheoficial, la visaoro, las dietas y el sueldazo).
Por eso duele que quieran barrer de un plumazo los vuelos comerciales de Matacán para desplazarlos a Villanubla, en otra desconsideración al resto de esta supuesta Comunidad. Porque el centralismo de Valladolid no trae más que miseria y tenemos que ver con envidia la evolución de Comunidades tradicionalmente más pobres, como Extremadura o Castilla-La Mancha.
Eso sí, lo que Valladolid no puede borrar en la añoranza es la llegada avión de Suiza, como se conocían a los DC-9 de Aviaco que, cada domingo, convertían a Matacán en una romería.

José Tomás 'empobrece' la Feria de Salamanca

Las presentaciones de los carteles tienen, entre otras cosas, el atractivo de esperar a ver quién dice la gracia más celebrada. Mientras, el empresario muestra su cara más gentil y diplomática, a la hora de contestar cualquier pregunta.
Ese día todos son muy amigos del alma y se esfuerzan tanto en aparentarlo que nadie lo pone en duda, a lo mejor para compensar cuando a La Glorieta llegue la feria y abunden las caras largas. Porque durante esos días por la explanada del patio se cruzan miradas que no necesitan palabras. Generalmente porque a la empresa casi nunca le guste lo que han reflejado los medios sobre ellos, en ocasiones plumillas que quieren destacar dando estopa, aunque apenas luego sepan cómo funciona la noria del toreo.
Son cosas de septiembre, para lo que ya se caldea el ambiente. Por cierto, otra de las preguntas que se hacían pero que el empresario declinó contestar es lo que cobran los toreros.
Pero según fuentes oficiosas, José Tomás tendrá unos emolumentos de 180.000 euros (es decir unos 35 millones de las antiguas pesetas). La otra pregunta, ¿cómo se purga ese gasto? pues abaratando toreros que llegan con escaso bagaje, es decir los más modestos. Ya se imagina usted, ¿a que sí?